Una buena alimentación es indispensable para todas las niñas, niños y adolescentes, incluidos los migrantes
La actual crisis alimentaria agravada por la guerra, el cambio climático y los efectos de la pandemia han elevado el precio de los alimentos. Lo cual afecta en mayor grado a las poblaciones vulnerables como niños, niñas y adolescentes y genera enfermedades como desnutrición, obesidad y anemia.
El panorama es aún más complicado para los migrantes y refugiados venezolanos, que huyen de su país por la violencia, falta de alimentos, medicinas y servicios esenciales y encuentran estas mismas dificultades en los países de acogida. Las familias venezolanas han adoptado al menos una estrategia para afrontar estas dificultades y así costear sus alimentos, entre las cuales están pedir dinero prestado, realizar trabajos de corto plazo y reducir gastos en rubros como salud y educación.
Por eso, World Vision apoya a las familias migrantes a través de la entrega de CASH para que puedan costear sus gastos alimenticios.